PROFECO. CONSUMO INTELIGENTE.
El Benzoato de sodio es una especie de sal blanca, brillante e inodora aunque sí tiene sabor, y está contenida en muchos alimentos de manera natural como las manzanas, arándanos y ciruelas; sin embargo es utilizado en forma masiva como un producto químico añadido en pequeñas cantidades a los alimentos para preservarlos frescos.
Aunque se añade como benzoato, se transforma químicamente utilizando la propia acidez de los alimentos en ácido benzoico, que es propiamente el agente activo. No todos los conservadores son adecuados para todos los alimentos, puesto que su efectividad depende de la composición que tengan. El benzoato es más eficiente en productos ácidos como jugos, mermeladas, aderezos, salsas, embutidos, condimentos o refrescos. También se usa para detener el proceso de fermentación de vinos, y en la industria farmacéutica para la preservación de los medicamentos en diversos productos de uso personal, como la pasta de dientes.
Lo que debemos tomar en cuenta es que el consumo excesivo de alimentos procesados con lleva a sobrepasar la ingesta diaria admisible, IDA (máximo 5 mg/kg de peso corporal). Si tienes hipertensión, problemas de circulación, asma, enfermedad cardiovascular o problemas de insuficiencia renal el consumo de este conservador representa un riesgo.
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