Internacional

Se recrudece la tensión entre EE.UU. e Irán

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Washington, EE. UU. (Agencias).-  La tensión entre Estados Unidos e Irán recrudeció ayer con el intercambio de duras amenazas entre ambos países y la advertencia del gobierno de Barack Obama a Teherán de que no tolerará ninguna perturbación al tráfico por el estrecho de Ormuz, vital para el suministro de petróleo en el Golfo Pérsico.

Por segundo día consecutivo, las autoridades iraníes advirtieron ayer que Irán puede cerrar fácilmente el estratégico estrecho de Ormuz -conocido como la yugular de Occidente- por el que fluye una sexta parte del petróleo del mundo.

El vicepresidente iraní, Mohammed Reza Rahimi, ya había amenazado anteayer con cerrar el estrecho -lo que interrumpiría las exportaciones de crudo- si Estados Unidos y sus aliados imponen sanciones a los envíos petroleros de Irán, el tercer mayor productor de crudo del planeta.

«Para las fuerzas navales iraníes es muy fácil cerrar el estrecho de Ormuz», insistió ayer el almirante Habibollah Sayyari. «Todo el mundo sabe que Irán tiene el control total sobre la estratégica vía marítima.»

El estrecho de Ormuz se encuentra en la entrada del Golfo Pérsico, entre la Península Arábiga e Irán. A través de este estrecho, de unos 50 kilómetros de ancho y más de 200 kilómetros de largo, los buques petroleros transportan entre el 30 y el 40% del petróleo mundial.

La respuesta del Pentágono no se hizo esperar. Desde Dubai, en los Emiratos Arabes Unidos, la vocera de la V Flota de la armada estadounidense le advirtió a Irán que cualquier interrupción del tránsito en el estrecho «no será tolerada».

«Quienquiera que amenace con alterar la libertad de navegación en un estrecho internacional está evidentemente fuera de la comunidad de naciones; ninguna interrupción será tolerada», advirtió la teniente Rebecca Rebarich, vocera de la Flota, que cuenta con una ventaja en la zona de 20 barcos apoyados por aviones de combate, 15.000 militares en las aguas y otros 1000 en la costa.

La armada de Estados Unidos «siempre está lista para contrarrestar las acciones malévolas con el fin de asegurar la libertad de navegación», añadió.

Las amenazas de Teherán dejan en evidencia la creciente preocupación iraní de que Occidente esté a punto de imponerle nuevas sanciones dirigidas a la vital industria petrolera de Teherán y sus exportaciones.

Los nuevos tambores de guerra revivieron los temores en los mercados internacionales sobre una posible caída en los suministros de petróleo iraní. Un alto funcionario petrolero saudita dijo que las naciones árabes del Golfo Pérsico están listas para intervenir de ser necesario y contrarrestar cualquier pérdida potencial de crudo de Irán en los mercados mundiales.

Justamente el intercambio de declaraciones cada vez más subidas de tono elevó ayer los temores a un conflicto bélico que podría disparar el precio del petróleo en momentos en que la economía está en serios problemas.

Mientras tanto, Irán continuó ayer con una serie de ejercicios militares que durarán varios días, una clara respuesta a los crecientes temores a un ataque preventivo de Estados Unidos o Israel contra las instalaciones nucleares iraníes.

Ayer, el popular blog norteamericano The Daily Beast afirmó que el gobierno norteamericano estaría dispuesto a lanzar un ataque militar contra Irán si el programa nuclear del régimen de los ayatollahs llegara a alcanzar «ciertos objetivos».

Según las fuentes, negociadores israelíes y norteamericanos «intensificaron este mes» las «sensibles» conversaciones para analizar una solución militar a los progresos nucleares de Irán, que tendrían como fin el desarrollo de un arsenal atómico, según confirmó un informe del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) de Naciones Unidas.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, habría recibido con disgusto las declaraciones del secretario de Defensa norteamericano, Leon Panetta, que a principios de diciembre afirmó que «un ataque israelí contra Irán llevará a un conflicto que Estados Unidos lamentará».

Desde hace años, las autoridades israelíes advierten a la comunidad internacional que consideran el plan nuclear iraní una amenaza a su existencia y que, como último recurso, debe ser interrumpido por la vía militar.

Según The Daily Beast, el gobierno de Obama retomó en las últimas semanas las conversaciones con funcionarios israelíes para asegurar a Netanyahu que la Casa Blanca está lista para apretar el «gatillo» si Teherán cruza ciertas «líneas rojas». Si eso ocurre, el Pentágono lanzaría un «ataque preventivo» contra las plantas nucleares iraníes sospechadas de trabajar en dispositivos atómicos militares.

redaccion

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